Volando de Buenos Aires a Dallas en American Airlines Main Cabin Extra

un grupo de personas en un escenario

En Noviembre estuvimos unos días en Texas, y aprovechamos la oportunidad para mostrarte algunos detalles del viaje. Repasemos en este post el vuelo entre Buenos Aires y Dallas, volando en un 777-200 de American Airlines.

El aeropuerto

Llegamos a Ezeiza con tiempo, unas tres horas antes del vuelo. Luego de validar el ticket de estacionamiento cortesía de Amex Platinum, nos fuimos para el check-in de American.

una pantalla de televisión encendida

Aprovechando el status Gold LATAM, despachamos las valijas en el sector Priority de American, sin siquiera usar las máquinas automáticas. Todo muy cómodo y rápido.

Nos fuimos entonces para arriba, pasamos seguridad, que también estaba tranquilo, y llegamos al sector de migraciones. Estando en la fila, se oye el llamado «Argentinos mayores viajando con pasaporte…». Estaban mandando gente a las nuevas máquinas de migraciones, idénticas a las que hay para el ingreso al país, pero en este caso para salir. Lo mostré oportunamente en Twitter.

Así pasamos rápidamente migraciones y nos fuimos para el VIP de LATAM, donde nos quedamos un buen rato hasta que llegara el horario de embarcar.

Sala VIP LATAM, Buenos Aires Ezeiza

También aproveché para escaparme hasta la sala Centurion de Amex, que hacía tiempo no visitaba. Para mi sorpresa, la encontré con muchas mejoras, y bastante vacía. Llegué a arrepentirme de no haber visitado primero esta sala, ya que la de LATAM se fue llenando y ya cerca de las 8 de la noche estaba completa. Será la próxima!

De todos modos, sirvió para armar esta breve recorrida.

Sala VIP Centurion American Express, Buenos Aires (Ezeiza)

Cerca de las 8:10 pm, nos fuimos de la sala de LATAM hacia la puerta 9, desde donde salía nuestro 777-200 hacia Dallas.

avión en la pista de un aeropuerto

Al lado estaba uno de los AA que salía a Miami, si no me equivoco.

Interfaz de usuario gráfica

Mientras salíamos del ascensor, se oía el llamado de embarque. Por supuesto estaba lleno de gente haciendo fila, quien sabe desde hacía cuanto! Esperamos del lado priority, y luego de Business y Premium Economy, llamaron al «Group 4«. Este es el grupo de embarque para socios Gold de AAdvantage, o OneWorld Ruby (LATAM Gold en nuestro caso). Lo que anteriormente se llamaba «Priority AAccess», en American.

Embarque prioritario AAdvantage Gold

Nos hicieron el chequeo de seguridad adicional que hacen en todos los vuelos a USA, escaneo de boarding, y a la manga!

una estación de tren

El vuelo

El avión era un Boeing 777-200 con el interior renovado. La business tenía su nueva configuración, con los excelentes asientos en configuración «reverse herringbone», o «espina de pescado», todos mirando hacia adelante.

imagen en blanco y negro de un tren

Luego ví por primera vez la cabina Premium Economy de AA. La verdad se ve muy cómoda. Un buen upgrade desde economy, que en muchas ocasiones no implica demasiado costo adicional.

una persona con una maleta de viaje

un bano con un inodoro

Seguimos caminando, y llegamos a nuestro sector de Main Cabin Extra. Como contábamos en un post reciente, los asientos MCE son idénticos a los de economy normales (Main Cabin). La única diferencia es el espacio con el asiento de adelante. Si bien son unos pocos centímetros, (unos 10cm como mínimo), pueden hacer la diferencia para personas altas.

Cómo Seleccionar los Mejores Asientos de Economy en American Airlines

En los Boeing 777-200 reconfigurados de American Airlines, las filas que tienen MCE son:

  • Filas 17, 18, 19 completas
  • Filas 26, 27, 28 completas
  • Filas 20 y 29: sólo el sector central (asientos D, E, G, H)

En total son 66 asientos MCE en este tipo de avión, y 146 en Main Cabin, totalizando 212 asientos de economy. Les recomiendo siempre el sitio SeatGuru, para verificar el avión que les toca, y su configuración de asientos.

un grupo de personas en el asiento de un auto

un grupo de personas en el interior de un carro

Para ponerlos en contexto, acá les dejo una foto en MCE que me pasó un amigo (?) que mide 1,75m:

imagen de la pantalla de un video juego de un carro

Como comparación, veamos los asientos Main Cabin, los normales, donde se puede ver la diferencia de espacio:

un grupo de personas en un coche

Los asientos son como decíamos renovados, y una tremenda mejora comparado con los viejos que tenía AA en sus 777. Para quien se acuerde, eran unas pantallas diminutas, con una pésima calidad de video.

un microondas encima de un coche

Ahora son bien modernos, con una muy buena pantalla táctil, cargador y puerto USB. El día y la noche.

Bueno. Suficiente con los asientos.

Despegamos sin demoras, y como suele ser costumbre salimos hacia el noroeste, rumbo a Santiago.

Aproximadamente una hora después del despegue pasaron con el servicio de comida. Siendo American, no esperábamos mucho, ya que su servicio deja bastante que desear, en todas sus cabinas.

Tampoco había tanta hambre, ya que en el VIP uno siempre aprovecha a tomar y comer algo. La prioridad estaba en mirar alguna película y dormir.

bandeja con diferentes tipos de comida en una caja de plástico

Llegó entonces la comida, con aspecto de pocos amigos como decíamos. Elegí la carne, que estaba aceptable (yo tampoco soy muy exquisito que digamos), con unas papas y verduras. Creo que comí todo (bueno, quizá sí tenía hambre!), y probé el postre que era como una tortita de coco. Bastante bien.

Con la comida ofrecían cerveza o vino sin costo adicional. No sé si también otras bebidas alcohólicas están incluídas.

Dejé el resto de la comida, tome toda el agua, y esperé que pasaran a buscar todo así me disponía a descansar. Para ese momento ya llegábamos al Océano Pacífico.

Mapa

A este punto recordé que el vuelo tenia wi-fi, como es en casi todos los vuelos de AA. Por curiosidad miré los precios, aunque sabía que no contrataría el servicio, ya que no tenía necesidad de usarlo.

Gráfico

Arriba se ven los precios, que no están nada mal. 19 USD por un vuelo de 10 horas está muy bien para alguien que lo aproveche, y la velocidad es muy buena.

Antes de dormirme di una vuelta, y saqué esta foto:

un grupo de personas en el interior de un carro

Acto seguido me dormí, algo entrecortado, pero bien.

Me desperté faltando sólo 1:30 hs para llegar a DFW, y fui a estirar las piernas por la cabina.

un grupo de personas en un escenario

Un rato más tarde trajeron el desayuno, o bueno, algo que suponía serlo.

Calendario

Creo que no comí nada, un poco porque estaba medio dormido, otro porque no tenía nada de aspecto tentador, y último porque un rato más tarde me esperaba el nuevo Centurion Lounge de DFW.

Así fue terminando el vuelo, aterrizamos en Dallas según lo planeado, y llegamos a la puerta en horario.

La llegada a Dallas

Desembarcamos rápidamente, y nos dirigimos a la zona de migraciones, el primer paso que uno debe hacer cuando llega a USA.

 

tienda con ventanas grandes y letras blancas

Si uno presta atención hay algunos carteles que nos van indicando el sector de color de migraciones que nos corresponde según ingresemos con Global Entry, Visa de turista, ESTA, u otros:

la fachada de un local comercial

En migraciones habremos tardado una hora aproximadamente. Si bien el vuelo llega pasadas las 5 am y no es hora pico, llegaban a la misma terminal varios vuelos de Sudamérica, y había muy pocos agentes atendiendo.

Luego de migraciones buscamos la valija, pasamos aduana (muy rápido, sin preguntas), redespachamos la valija, y nos fuimos para la salida.

una persona parado en un aeropuerto

Como conectábamos a Austin, volvimos a pasar seguridad, y nos fuimos a esperar tranquilamente el siguiente vuelo. Dónde? Qué mejor que el espectacular Centurion Lounge DFW, que les mostraba en este post. Finalmente llegaba la hora de desayunar 😉

una puerta de vidrio

Costo del pasaje

Durante una de las tantas promociones de premios reducidos que lanza LATAM Pass, había aprovechado en Agosto a canjear 2 pasajes en economy a Los Angeles vía Santiago, por 38.000 millas LATAM cada uno, ida y vuelta.

Luego los planes de viaje cambiaron, y volar a LAX no tenía tanto sentido ya que íbamos para Texas. Aprovechando que el vuelo directo EZE-DFW tenía disponibilidad para las fechas deseadas, llamé a LATAM y efectuamos el cambio.

En definitiva, terminamos pagando 38.000 millas LATAM + impuestos por cada pasaje en American economy, directo a DFW desde Ezeiza. Nada mal, considerando que el canje estándar para este vuelo son 43.500 millas LATAM Pass. Otras alternativas podrían ser 50.000 avios, o 60.000 millas con AAdvantage. Todos precios ida y vuelta, economy, por persona.

Para volar en economy a USA en American, si volamos directo, LATAM Pass suele ser la mejor opción de canje.

En un párrafo…

American Airlines es la aerolínea que ofrece más vuelos directos entre Argentina y USA. Si bien no se destacan por el servicio, la comodidad de volar directo a Dallas, en esta oportunidad, hacía la diferencia. Pudiendo seleccionar asientos Main Cabin Extra, volando de noche y aprovechando el tiempo, una muy buena opción por sólo 19.000 millas LATAM Pass.

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